Octavio y Niara: De Roma con amor

Octavio (un general romano) volvía de su última batalla en tierras enemigas.Regrasaba de una ciudad al sur de Cartago y con él traía un trofeo de guerra, Niara, una mujer negra como la noche, con los ojos color miel, unas caderas con forma de jarrón y un carácter que partía cualquier piedra.

Al llegar a su morada ( luego de meses de viajar a través del territorio del imperio) Octavio se bajó de su caballo y ordenó que quitaran el grilletes del cuello a aquella esclava, que la bañaran y vistieran con sedas del oriente mientras el discutía cuestiones de títulos con el senado romano.
Luego de intensas discusiones Octavio volvió a su domus buscando como lobo hambriento a su esclava negra y de carácter picante. Ella vestida tal cual lo pidio él, esperaba mirando por la ventana de la morada unas estacas de empalamiento deseando morir.

Al llegar Octavio le ordena que se arrodille ante él y comience a lamer su espada, Niara obedeció y lamio el filo de su gladius como el fiel perro que lame la mano de su amo, Octavio al ver esto exitado mete la mano en su toga, saca su miembro y le pega en la cara a Niara, agita su pija pegándole en los labios, en los pómulos y le ordena que se la trague toda, que toque su campanilla, que haga que le den arcadas, ella obedece. 5 minutos después la agarra de los pelo, la nuca y la empuja contra su pija sólo aflojando para dejarla respirar. Ella empieza a toser y le pide por favor que la mate, que desea morir antes de sentir su pija entre las piernas.

Octavio al escuchar esto siente como la pija le va a explotar, entonces saca su espada de la vaina y se la arroja a Niara diciéndole, "si me matas seras libre pero si pierdes serás mi esclava sexual hasta que mueras.
Niara sin más agarra la espada y ataca al general romano. En su primer movimiento corta la mejilla de Octavio y este ( al contrario de lo que cualquiera pensaría) se éxito más, sintió la sangre correr por sus pómulos y se éxito más. Esquivo la segunda embestida de Niara pero no pudo evitar el golpe de rodilla que vino detrás, por lo que cayó al piso pensando en la hembra que se había ganado, en las veces que la cojeria sin cuartel.

Al volver en si, ve como Niara lo iba a atravesar con la espada pero rápido de reflejos se incorpora, le quita la espada, la empuja y está cae indefensa en la arenisca del patio. Octavio se acerca y como Minotauro le arranca la ropa, le abre las piernas y la penetra, sumerge su pija en esa concha de evano, mientras ella se resistía, sale y entra sale y entra mientras Niara comienza a resistirse menos y a gemir más. Octavio, ya en face toro juega con su dedo y el culo de Niara mientras ella se babea de placer, gime y grita en su lengua natal mientras el general le dilata los labios, hace que su clítoris se habrá como flor en primavera, que su cola se abra para sentir algo duro que la desgarre.


Luego de un tiempo de la Concha de Niara fluye un mar de chocolate, un mar del cual el general bebé como un sediento en Gobi. Pero bebé con su puja dura como su espada pero caliente como su vino por lo que luego de beber da vuelta a Niara ( que temblaba como hoja en invierno) y la perforación por detrás, le abre la cola como las puertas del.mismo imperio, se la dilata con cada pinchazo, se la abre más y más hasta que Niara empieza a apretar más y más por lo que ese general romano comienza a gemir y si media palabra, saca su puja del cuño de Niara y la coloca en su boca, ordeñar su pito hasta que su esclava se beba la última gota.

Bueno espero les halla gustado y escucho sugerencias
para la próxima historia 🙂

Abrazo de gol!!

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