Claudia vengativa... Cap 13 a 16

Claudia es una perra vengativa 13

Fui directo hacia el cuarto, estaba boca arriba en la cama masajeando su conchita que desbordaba la leche del cabron este.
-Viste que bien me lleno… como se calienta conmigo… seguro que te gustaría cogerme… quiero que me sientas así… llena de leche… con la concha bien caliente por la cogida de Exequiel… y por la dureza que noto en tu pantalón parece que tenes ganas… -yo me quede callado.- la diferencia está… en que si me querés coger me vas a tener que ir contestando cada pregunta que te haga…-mientras hablaba se pajeaba y tenía una vibración en su vientre, parecía estar como en un post orgasmo muy dulce que la sacudía de a ratos.- Cada pregunta que te haga… si no contestas… paramos… -se palmeo la conchita indicándome cual era mi lugar, me desnude rápido, desesperado y se la fui metiendo despacio. Que sensación tan extraña y a la vez me encantaba, estaba bien cremosa. Y esa fue su obvia primera pregunta.
-Te gusta sentirme así… llena de la leche de Exequiel…
-Si me encanta…
-Aaaaaaaaahhhhhhh como me calienta… que marido tan servicial… me encanta… no sirve para nada… pero servicial… aaaaaaaa…… -yo trataba de darle lo más duro que podía y aguantando lo más posible.
-Que pensás de lo que dijo…?
-De que…? Me puso una mano en el pecho y saco mi pija de su concha.-
-Dejame descansar un rato que estoy cansada, no te pajees. –me fui a la cocina me serví un gancia y fui al sillón del comedor a ver la tele un rato, volaba de calentura. Ella quería respuestas, yo estaba hecho un nudo. Apague la tele y fui al cuarto.
-Te quiero coger… -se abrió de piernas y se palmeo otra vez la conchita-
-Venga cuernito venga… pero ultima chance… si se hace el boludo se queda caliente cuernito… -se la clave de nuevo y se la deje bien a fondo mientras le comía la boca como un desesperado, ella devolvía el beso hasta que me mordió el labio sacándome sangre. Aleje mi boca.
-Que pensás de lo que dijo…?
-Es un lindo juego de fantasías nada más…
-Te calienta fantasear que el me llene…
-Si me calienta…
-Bien cuernito así tenes que contestar aaaaaaaaaaaaaa…. Como me calienta… que seas tan inútil e infeliz… entregador tal vez…?
-Lo que a vos te de placer…
-Y si me da placer que Exe me llene…? –yo intenté apurar mi cogida para llegar al orgasmo, pero ella me apretó del culo contra ella sin dejarme mover. Esperaba mi respuesta. Yo me sentía al borde de llegar, tenía una angustia profunda pero mi calentura era mayor, a la vez sabía que me acercaba peligrosamente a gozar con el maltrato cada vez más, me sentía volar de caliente y la pausa de ella reteniéndome y esperando me calentaba más. Acercó su boca a mi oído:
-Quedate quieto… no me cojas más… -soltó su mano de mi culo, no me moví, pareció agradarle y siguió hablándome en el oído, con voz de perra en un susurro, pero exagerando su voz de puta.- la próxima vez que venga… me vas a chupar la conchita… bien despacio… y a los dos nos va a calentar mucho… te acordás que al principio no querías mirar… bueno… la próxima me la vas a chupar para que el me coja… para que me encuentre bien jugosa y caliente con la chupada del cornudo de mi marido que me entrega… que me chupa bien… para que él me coja y me dejé su leche en lo más profundo de mi concha… mientras mi marido mira como un boludo…. -mi pija empezó a escupir leche y la empecé a taladrar con violencia, sabía que era un camino sin retorno, que cada vez buscaría más humillación y que ella iría subiendo la dosis para hacerme llegar en el momento de mas humillación posible, sentía el registro en mi cuerpo. Sentí que exploté como hacia mucho no lo hacia y que me sentía a la vez humillado y agradecido. Ella se levanto de la cama, salió de la pieza y se fue a bañar, me pidió que la fuera a enjabonar le limpie su cuerpo, lo enjabone bien. Me hacía detener en alguna marca que tuviera, mordida o pellizco, que la observara con detenimiento y la limpiara. Ella se acariciaba de a ratos su pepita, feliz como una niña mala. Después la envolví con la toalla, me dio un beso muy profundo en los labios, se fue a la cama a descansar un rato. Yo me tire en el sillón a mirar la tele y me quedé dormido. Me desperté con mi pija en la boca de Claudia que me la chupaba dulcemente.
-Estuviste muy bien… estoy muy feliz… creo que vamos a ser muy felices ahora… creo que entendiste por fin cual es tu lugar… -yo solo callaba. El lunes lo voy a invitar a Exe al consultorio… quiero ver si hacemos lo que te dije… -mi pija se puso más dura, ella se la sacó de la boca y me miró sonriente.- Que rápido aprendiste… y tu cuerpo ya quiere más… está ávido de más… el lunes te parece bien… o es muy pronto…?
-Cuando vos digas…
-El lunes entonces… quiero que me elijas la ropa interior… que la elijas pensando en cual lo puede calentar más al pendejo… -mi pija dio otro brinco, me sentía indefenso, quería ocultar las señales de mi cuerpo, me miro otra vez sonriente.
-Te amo cuernitos… me voy a dormir otro rato… no te quedas hasta tarde viendo la tele. Mañana podríamos ir a pasear los tres con Lucía no? Como una hermosa familia. dijo mientras se alejaba caminando desnuda y muy cadenciosamente hacia el cuarto.

Claudia es una perra vengativa, 14

Le elegí un culote rojo calado que le queda precioso, enmarca ese culazo y lo realza en toda su hermosura. Ella estaba encantada con la elección.
-Muy bien mi amorcito… estás caliente ya…? –decía mientras caminaba por el cuarto con unos zapatos de taco blancos, el culote rojo, el sujetador del juego y puso sus tetas sobre el sujetador, caminaba como desfilando para mi, cruzaba una pierna delante de otra como hacen las modelos.- Mira cuando me vea Exe así… y delante tuyo… y vos mirándonos como un taradito… con la pija dura como ahora… te calienta ehhhh perro…?
-Si… me calienta mucho…
-Ya se… mírenlo al cornudito que no quería mirar… -decía mientras se ponía esos aros redondos grandes que me vuelan la cabeza- te acordás que los usaba solo para vos… porque te calentaban… ahora también… me los pongo porque se que a vos te calientan… -se pinto los labios y se planchó el pelo. Yo miraba embobado su paulatina transformación estaba para cogerla ahí mismo. la lleve con su coche al hospital y me volví a casa a atender a Lucía, no le iba bien en la escuela no quería estudiar, no quería hacer nada, estuvimos como media hora discutiendo sin parar, me sentía enojado y frustrado. Encima ella me decía que yo no tenía nada que decirle, que no era su papá, me contuve para no darle un bife, nunca me había parecido correcto pegarle a un chico y obvio menos a una niña adolescente, pero la verdad últimamente me sacaba más que nunca. Salí de la casa y me fui a dar una vuelta. Volví al rato despejado, le hice el almuerzo y me fui para el consultorio. Empecé a organizar el trabajo, empezaron a llegar los pacientes, al rato llegó la Dra., estaba con un ambo azul, estaba deliciosa para mi gusto, con esos aros y yo la imaginaba solo en ropa interior, me dio un beso en la mejilla porque no le gustaba besarme cuando había pacientes.
La tarde transcurrió con mucho trabajo, montones de pacientes, sobre las 20 horas sonó el timbre, ya suponía quien era, entró Exequiel, su sonrisa socarrona, me dio la mano con superioridad, con aires de goce y triunfo.
-Avísale a mi perrita que llegué…
-Dra.… llego el Señor Exequiel… -Dice que la espere sentado, que enseguida sale a atenderlo. Claudia me había dicho que no quería que lo tuteara más a Exequiel, que lo tratara de usted y con un cuidado y respeto especial. Le debíamos mucho. Salió la última paciente del consultorio y me pidió un turno para el siguiente mes. Le avise a Claudia que se había ido la última paciente. Exequiel seguía sentado y me miraba entre divertido y sobrador.
-Quiere tomar un café…
-Bueno con poca azúcar…-le serví el café, ni siquiera lo miraba a la cara, así me lo había indicado Claudia también, tenía que bajar mi mirada para hablar con él.
En ese instante apareció Claudia igual que en el cuarto, tetas sobre el sujetador culote y zapatos de taco, aros redondos, desfilo un rato sensualmente para él.
-Le pedí a mi marido que eligiera una ropa que te caliente… eligió bien…?
-Estás deliciosa… -se puso de pie y se acercó hacia ella, se empezaron a franelear bien duro-
-Mi amorcito… te gustaría ver como mi marido me la chupa… la conchita… me calentaría mucho… que lo haga… no te molesta… -el tipo me miro divertido, yo baje la mirada y Claudia se acercó caminando hacia mi. Se corrió a un costado la parte de adelante y me dio su concha a chupar.- Si chupa bien infeliz… para que mi amorcito me coja… me descargue bien adentro… aaaaaaaaaaaaa……. como me calienta…. Chupa calentame para mi macho… -Exequiel se acercó no aguantaba más la apoyo sobre el escritorio de la recepción saco su pija y la clavo de una, la cara de Claudia era un poema, estaba caliente con toda la situación.
-Que linda pija tenés cielito… que suerte tiene tu novia…
-Vos sos mi perrita favorita... no me canso de cogerte nunca… -le mordía los pezones como un desesperado, la dejaba toda marcada, y bombeaba frenéticamente sin parar. Los dos totalmente olvidados de mi presencia, siguieron en lo suyo, hasta que el le lanzó su descarga, otra vez bufaba como un animal. Se quedó un rato más dentro de ella y luego salio de a poco mientras se besaban dulcemente.- pensaste en lo que te dije…
-Despacito amorcito… mira que servicial se está poniendo mi maridito… con el tiempo… -se volvieron a besar su pija dura de nuevo el la puso de perrito contra el escritorio tenía el culote puesto todavía y le empezó a dar cachetazos en el culo. Mientras le decía
-Sos una perra puta…
-Soy tu puta amorcito… toda tuya… -seguía descargándole sopapos.
-Cuando me vas a dar el culo…?
-Noooo… por el culo no me gusta… -decía con una voz de puta relajada que era para partirla, pero el chabón parecía no entender.- ponemela en la conchita dale decía mientras movía la cola para calentarlo aún más, y así lo hizo se la volvió a dar por la concha y la cogió duro de perrito mientras le tiraba del pelo y le mordía el cuello hasta que volvió a explotar bufando. Se salió despacio y fue hacia el baño, Claudia se dejo caer como estaba sobre el escritorio, estaba agitada.
-Tráeme papel para limpiarme… sino voy a manchar todo… -exagerando siempre su voz de puta. Llegué con el papel a su lado y se lo tendí.- Limpiame que esperas… junta toda la leche que puedas… -la limpié lo mejor que pude, ella se calentaba con la operación yo me sentía raro. Exequiel salio del baño la beso y le dijo que se tenía que ir que su novia después le armaba unas broncas de aquellas. Se besaron como enamorados y el se fue. Claudia se acariciaba su conchita.
-Me encantaría que me la chupes un ratito… total ya sacaste la lechita… los labios aunque sea… sin abrir… dale te animas… después te dejo que me cojas rico… hasta por ahí te dejo por la cola… que no me la hace mi amante… -me sentía más caliente cada vez, me arrodille delante de ella y solo le di unos besitos por sus labios y tratando de evitar cualquier resto de la corrida del flaco, la calentura de claudia no tenía comparación con nada que yo recordara, se giro otra vez. Y me dijo
-Rompeme el culo, estoy recaliente, no tendrías que ser vos… pero este pendejo es un boludo… dale que es una de las ultimas veces que lo vas a usar dale… -se la clave despacio y me entretuve, saboreaba la entrada y salida de mi pija en esa hermosa gruta, siempre le había encantado el sexo anal. Pero quería que el chabón lo recibiera como un premio exclusivo y no se daba cuenta.
-Estuviste muy bien… cornudito… muy bien… de a poco me vas a ir chupando más… hasta que pierdas todo pudor… -yo la bombeaba cada vez más duro- la próxima vamos a hacer eso… si…me vas a chupar bien delante de él… después que me eche el primero… -me sentí lleno de furia y dolor, y mi cuerpo respondió con su nuevo aprendizaje, yo también bufe como un animal, pero herido.


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Y así empezaba a ordenarse nuestra vida, yo aceptaba mi condición, Claudia feliz, como perra con dos colas y todo eso. Detestaba profundamente al pendejo y el me detestaba a mí, yo llevaba siempre las de perder. Un mediodía la tenía que pasar a buscar a Claudia para llevarla a hacer unos tramites, me llamó al celular, yo estaba con su coche, me dijo que se le había complicado todo que no la esperara más, que me fuera para casa, cuando estaba por arrancar al lado de mi ventanilla estaba Mary, terminaba su turno, me clavo esos ojos claros y pude ver sus pechazos en una especie de remera semitransparente que tenía escrito con letras plateadas sexi. Me dijo si no la llevaba hasta la casa. Yo quise excusarme pero no me dio oportunidad me clavo esos ojos y no me pude resistir, en diez segundos estaba sentada al lado mío, me dijo adonde iba y hacia ahí arrancamos.
-Tenés una deuda conmigo… -dijo y me clavo de nuevo esos ojos- no me pudiste coger porque estaba la celosa de tu señora… en casa no hay nadie… supongo que vas a bajar a tomar un café…
-Mira en realidad yo la amo a Claudia y si se entera se me arma un flor de quilombo. –empezó a acariciarse sus pechos con detenimiento, tratando de no llamar mucho la atención.
-Porque se iba a enterar… dicen que tengo una conchita muy jugosa… y que es apretadita como un culito… para mi exageran… si se que siento cuando me clavan que me rozan todas las paredes de mi conchita… perdoname con esta charla te la complico más… querés dejarme por acá y me tomó el Bondi. –no pude contestar, quería salir corriendo, pero me moría de ganas de clavarla, tenía unos pechos tremendos y desbordaba sensualidad.
-Bueno solo un café… -le dije y me sentí como el hombre mas estupido y pelotudo de la tierra.
A los diez segundos de entrar en su departamento sus pechos estaban sobre el sujetador su remera había volado y yo chupaba como un desesperado me calentaban esos pechos, me volvían loco de calentura. Me guió mi mano a su conchita que estaba toda encharcada, realmente si que lubricas puta, pensé y me pareció que era realmente cerradita. Lo próximo que hice fue clavarla de una y esa era la sensación exacta, como coger un culito muy lubricado. No lo podía creer, pero a la vez sabía que si no hacía algo iba a terminar en menos de quince segundos.
-Que lindo como te late la pija… no aguantas más… dámela que me la trago toda… me encanta la leche… dámela en la boquita… -me exprimió la pija, se trago hasta la ultima gota y me miraba sonriente y agradecida, yo no lo podía creer. Ya más tranquilo le dije que mejor me iba, que no estaba bien, justo sonó mi celular, era Claudia.
-Hola amor… como estás…
-Donde estás…? Me dijo Exe que la vio a Mary subiendo al auto… -y la reputa que te parió pendejo hijo de puta.
-La acerque hasta la casa y nada más. Me invito a tomar un café y le dije que no.
-Sabes que no te creo… estás con ella no…? No tenés derecho a coger con nadie… si yo te daba permiso es una cosa… si no estás frito… vamos a hablar en casa…
-Pero no estoy con nadie… no entendés…
-Te la voy a poner clara… Mary esta enamorada de mi… soy la persona que más ama en este mundo… si mañana la mimoseo un poquito y le pregunto me va a contar de punta a punta. Si me entero por ella mañana, es tu ruina… vamos de nuevo entonces…te escucho… y no escuche ninguna de tus mentiras…
-Estoy en la casa de Mary…
-Te la cogistes…
-Un poco no aguante mucho… acabé enseguida…
-Bueno por lo menos no mentís… pasamela…
-Hola bombón como estás… dijo Mary. Pausa.
-No paso nada… no aguanto el pobre… le exprimí hasta la ultima gota eso sí… no seas muy mala bombón… te amo…
Salí de la casa de Mary sintiéndome el más tarado del universo. Pensaba en el fucking pendejo y lo detestaba con toda mi alma. La reputa que te parió pendejo de mierda y la concha de tu madre.
Cuando llegué a casa atendí a Lucia, y me quede toda la tarde leyendo, no teníamos consultorio. Esperaba ansioso la llegada de Claudia, cuando llegó estaba Lucía, tenía miedo que podría pasar, me asustaba el fantasma de tener que irme… la ruptura… Claudia entro… le dio un beso a Lucia y luego me dio un beso en los labios a mi, me sonrió y me acarició la cabeza. Yo no entendía nada que estaba pasando, en la cena charlamos animadamente de su día.
Cuando fuimos a la cama me dijo que ella ya venía, y se fue al baño a cambiar, se había comprado un conjunto de portaligas negro con una tanga que se le perdía en el ogt y un hermoso corpiño calado.
-Te gusto papi…? –mi pija reaccionó- me lo compre para Exe… lo quiero cada día más caliente… -se puso sobre mi y me montó solo corriendo a un lado la tanguita, se acerco a mi oído mientras ella me cabalgaba. Lo que hiciste hoy me ayudo a decidir… -mi pija dio un brinco anticipado- pedí turno con un gineco… me voy a sacar el diu… -sentí otro sacudón en las pelotas pero estaba lejos de llegar.- Vamos a tener que cuidarnos los primeros dos meses…-empezó a moverse más fuerte sobre mí estaba teniendo un orgasmo y ella sintió que yo me estaba acercando al mío y se volcó de nuevo en mi oído.- Con vos me voy a seguir cuidando… eh cornudito… me va a llenar mi amante…
-mi pija exploto, sentí como una punzada en el ogt, una angustia muy profunda y bufe como animal herido otra vez pero mordiendo la almohada porque estaba la nena. Claudia me besó en los labios.
-Te amo bombón.

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Finalmente fue así, fuimos enseguida al ginecólogo y se saco el maldito dispositivo, yo no sabía muy bien hasta donde iba a llegar esto, si era un juego o que. Pero estaba alterado la mayor parte del tiempo. Claudia planifico unas vacaciones con Lucía y el novio incluido, nos íbamos un mes en su receso de invierno. La nena levanto su puntería en el estudio, había cumplido 17 años y la posibilidad de irnos de vacaciones y llevar a su noviecito le parecía lo mejor del mundo. Estuvimos un mes en Brasil, con Claudia todo en orden, ni hablamos de ningún tema raro, el nombre de Exequiel no sonó en toda la temporada entre nosotros. Ella en algunos momentos se alejaba para hablar por celular y creo que ahí era cuando hablaba con él. Pero entre nosotros, como si no hubiera pasado nada, vacaciones, buen sexo cuidándonos con forro y todo eso. La verdad los dos volvimos renovados. Empezó la rutina normal, ese fin de semana la nena se iba con el novio. Íbamos a estar solitos en casa y me alegre que así fuera. Claudia me llamó a mi celular cerca de las cuatro de la tarde, me hablo muy melosa y me pidió que preparara un cena especial. Me mando un beso y corto. Me puse a cocinar y mientras cocinaba tome un hermoso tintillo, de los que me gustan. Prepare un lomo al champignon, cerca de la noche Claudia me avisó que llegaba en un rato, que pusiera la mesa en el comedor. Cerca de las 21 escuché la puerta, salí a saludarla, me dio un profundo beso.
-Vení a ayudarme… me voy a cambiar rápido que 21.30 le dije a Exe que venga… -sentí como una sacudida, un estremecimiento. Me hizo bañarla con detenimiento, ponerle su liguero, ropa interior, ponerle los aros. Se puso un vestido que le marcaba ese culazo delicioso. Cuando terminábamos el arreglo sonó el timbre. Justo había alguien entrando así que no tuve que bajar a abrirle. Claudia me miró fijo, me dijo.
-Anda a ponerte el traje de mozo que te había comprado para la fiesta que íbamos a tener con el señor del registro, rápido. –ella abrió la puerta, se besaron suavemente en la puerta, los escuchaba mientras me cambiaba, el le reprochaba que se hubiera ido un mes conmigo. Ella lo besaba dulcemente y le ponía el dedo índice en la boca para que callara.
-Ahí, viene el mozo… -el tipo me miró con sorna- También es nuestro cocinero… preparo una cena especial… para nosotros… y me baño y vistió para vos… para que vos me cojas… -el tipo no dijo nada pasaron a la mesa y les corrí las sillas para que se sentaran como si fuera un mozo realmente.
-Tráenos el vino ese que me regalaron el otro día… dale movete… bueno… quería darte una sorpresa… ya se que te enojaste… pero me fui para descansar… sabes que hice antes de irme…?
-No tengo la menor idea…
-Me saque el diu… no me estoy cuidando si llego a coger con algún jovencito me voy a tener que cuidar… -dijo exagerando su voz de puta que escuchaba de la cocina- sino me va a quedar la pancita llena… -el chabón se puso de pie y rodeó la mesa la beso y la empezó a manosear, Claudia lo separo- no seas apurado… tenemos toda la noche… la nena no viene… -yo justo llegaba con el vino.- sírvale al señor para que lo pruebe-
-Señor… -dije poniendo un poco de vino y bajando la vista
-Si servilo, esta bueno.
-Traenos la cena ahora por favor… y después fíjate… tenés la noche libre… si querés quedarte a ver si no andate… perdón… vos que preferís cielo…
-Quiero que se quede… que vea como te lleno de mi leche…
-Bueno no podes irte entonces… trae la cena ahora… movete…
Durante la cena charlaron animadamente, anécdotas del hospital, y todo de lo más aburrido posible. Cuando terminaron de cenar decidieron pasar directo al cuarto, se abrazaron y fajaron un buen rato, Claudia le dijo que se desnudara y acostara, su pija estaba bien dura y apuntaba al techo.
-Vení… sacame el vestido para mi amante… despacio… de a poco… calentalo bien… así se le llenan las pelotas de más leche… despacito… -le baje solo un poco los hombros del vestido, que quedaron expuestos, se quedo un rato así y luego me hizo bajárselo de a poco, me hizo poner de rodillas y solo corriendo la tanga a un lado me hizo chuparla un largo rato. Después lo monto, así como estaba vestida- me encanta tu pija… -el la volcó sobre la cama y empezó a bombearla- si dame duro… pero cuando estés por llegar sacala… mira que no me estoy cuidando… me podes llenar… me la vas a sacar amorcito antes de explotar…? –y al tiempo que Decía esto le cruzaba sus piernas por detrás de sus muslos atrayéndolo más hacia ella y ofreciéndose bien abierta- no me vayas a llenar… mira que es muy peligroso… avisame si estás cerca…
-La estoy reteniendo… siento que exploto en cualquier momento…
-Pero es muy riesgoso papi… me podes llenar… sacamela por favor… -decía con cada vez más voz de puta-
-Y que problema si te lleno…
-me da miedo… además esta mi marido acá al lado… va a pensar que soy una puta fácil… -se puso como loco y exploto, los dos se unieron en un orgasmo como pocas veces vi. Se quedaron entrelazados, la pija del muchacho enterrada en Claudia, sonó el celular que estaba sobre la mesa de luz, lo agarró y lo apagó. Salí del cuarto y me tiré un rato en el sillón, había tenido un orgasmo sin tocar, me sentí un viejo pelotudo. Me serví un whisky y trate de poner mi cabeza en blanco pero no pude. El muchacho salio al rato, lo acompañe hasta la puerta de calle, y Claudia me llamó del cuarto.
-Como estás…
-Acabé sin tocarme…
-Vení a chuparme… -me tire sobre ella chupe como si quisiera sacar cualquier resto de semen de dentro de ella, ella encadenaba una especie de orgasmo muy profundo, mi pija estaba dura de vuelta, cosa rara para mi, se la puse, me hizo salir y arrodillar en la cama. Tomo un forro y ella misma me lo puso.- Estoy sin protección… es muy peligroso coger sin forro… me podes llenar… -mi pija dio un brinco, ante la sonrisa socarrona de Claudia. La monte de una y empecé a cogerla sabiendo que iba a durar un montón
Se acerco a mi oído- si empujame la lechita… siento crema… como me lleno… te gusta comer las sobras… -mi pija como un garrote- te gusta eh… perro…?? La empecé a coger violentamente casi sin hablar, me sentía cada vez más violento y enfurecido, me volque sobre ella y le mordí el cuello ella respiraba cada vez más agitada-
-y vos puta…, que sentías?
-AAaaaaaaa… una mezcla… pensaba que no estaba bien lo que estaba haciendo… pero mi cuerpo se entregaba cada vez más… me abría más para el… para que me llenara como un verdadero macho… mientras lo histeriqueaba para calentarlo más… y funciono… aaaaaa… si cogeme puto cogeme… -la tomé del pelo y la gire, la deje culo arriba se la saque de la concha me saque el forro y se la clave en el culo.
-Toma puta culorroto… -le decía mientras le hacia una colita con su pelo y le mordía la nuca de a ratos…
-Pareces un hombre ahora… igual no podes competir… -le di unos viajes bien duros enctecerro sus ojos su boca semiabierta que yo aplastaba contra la almohada. Así como estaba de costado le escupí en la boca. Con su lengua quería juntar mi escupida-
Puta culorroto… te voy a matar a pijazos… hija de puta vos y ese pendejo del orto… -ella solo gemía y no decía nada, cuando le llene el culo de leche un orgasmo aún mas profundo de ella se unió al mío. Me levante y fui al baño. Cuando volví y me acosté en la cama ella puso su mano derecha en mi hombro y su cabeza sobre mi pecho. Nos dormimos en silencio.

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