Cornudo Internacional 2

Esa noche salimos únicamente los hombres, volvimos al pub anterior pero estaba en un estado de trance porque casi ni miraba al resto de las mujeres, sólo pensaba en lo que había visto, en cómo lo había visto. Entonces pregunté si al otro día iba a ser igual, Rafa me contestó que no, “No te quiero adelantar nada puesto que prefiero lo descubras tú”. Seguimos bebiendo y antes de la medianoche estábamos volviendo al hotel.
Llegué y María ni se inmutó, vi una crema en su mesa de luz la cual se había untado por su concha y culo. Levanté nuevamente la sábana para ver cómo estaba y comprobé que sus partes seguían coloradas. No pude aguantarme y me empecé a pajear mientras veía su culo brillando por la crema y el recuerdo de la pija negra reventando su concha.
Al otro día casi el mismo ritual, desayuno y charla amigable, las mujeres rumbeando por un lado y nosotros por el otro.
Volvimos al mismo lugar, al entrar volví a cargar mi tarjeta y enfilé al mismo lugar del día anterior pero Rafa me detuvo, “Me costó tiempo seguirle el ritmo a Charo pero ya conozco sus movimientos”. Lo seguí con la fe de un fanático religioso. Entramos a la parte amateur pero fuimos a otro pasillo, pregunté si me iba a adelantar algo pero Rafa siguió con el misterio, lo único que dijo fue “Hay que seguir las reglas, nada más”.
Llegamos a una puerta donde un rubio pinta de hooligans nos indicó donde pasar la tarjeta y nos señaló por donde seguir. Pasamos a un vestidor tipo gimnasio, dejamos nuestras ropas y pertenencias en unas gavetas y totalmente desnudos entramos a una gran habitación donde se practicaba un sofisticado gloryhole.
Lo que se podía ver era un total de ½ cuerpos de mujer, digo esto porque solamente se las veía de la cintura para abajo, 2 como si estuvieran recostadas boca abajo en una camilla con sus pies tocando el suelo, 2 recostadas con sus piernas hacia arriba y sus pies atados a la altura de los tobillos por unas agarraderas y una un poco más elevadas que el resto igual a las últimas 2. Al lado de cada mujer un cartel que indicaba lo que se podía hacer y lo que NO. Las 2 primeras se podía anal y vaginal, las 2 siguientes (con las piernas hacia arriba) solamente vaginal, y la última solamente oral. Además había 3 orificios para insertar tu pija. En casi todas había un dispenser de condones (obligatorios) y en uno de los orificios un cartel de prohibido acabar en la boca, o sea te hacían una oral a pito limpio. Rafa me explicó rápidamente que ninguna era profesional, todas amateurs, mujeres comunes con ganas de coger.
En total debemos haber sido 8 tipos, las más solicitadas eran las anales. Fui recorriendo a cada una deteniéndome unos minutos para ver cómo estaban, llegué hasta la que estaba colgada y no me aguanté y hundí mi cabeza. Era una concha rosadita y pequeña, de un aroma exquisito, apoyé mi lengua y sentí cómo su cuerpo se contrajo, tomé sus nalgas con mis manos y me zambullí hasta que me acabó en la boca. Rafa estaba detrás de mí y me palmeó el hombro. Me detuve en una que la estaban culeando porque me llamó la atención lo perfecta y bronceada de su piél, prometí no irme sin penetrar ese culo, ahora había 3 esperando su turno. La otra que aceptaba anal era más gorda y negra pero había 2 esperando. Me fui hasta las que aceptaban vaginal solamente justo en el momento que se desocupaba una, me apuré y me acomodé para que nadie me gane el lugar, me estaba poniendo el condón cuando reconocí lo que me estaba por coger, era mi mujer. La pija se me paró de inmediato y atiné a acariciar su clítoris con 2 dedos, un tipo se colocó al lado mío esperando su turno, yo me hice a un lado y con una seña le indiqué que le cedía mi lugar. El tipo me hizo una seña de aprobación, se puso el condón y se la empezó a coger, yo como estaba metí mi pija en el agujero que estaba justo al lado y empecé a gozar de una mamada tremenda mientras tenía primera plana de María siendo cogida. Acabé antes que el tipo pero no me pude mover. Se fue él, vino otro, y otro y otro. Le pasaron pijas de todos los tamaños. Rafa se me acercó y casi con una carcajada bromeaba de mi reacción, “ahora me quedo con esta y tú te vas a darle por culo a la que te quedaste mirando”. En ese momento entendí que era Charo la de piel bronceada. Así que con mi amigo Rafa hicimos un intercambio de parejas poco habitual.
Cuando llegó mi turno el sólo apoyarle las manos en sus nalgas hiso que se volviera a parar mi pija, metí un dedo gordo hasta el fondo, apoyé la cabeza de mi pija y se la mandé hasta los huevos, entró con muchísima facilidad. Gocé una barbaridad cogiendo ese culo mientras de reojo miraba como Rafa se cogía a María, por suerte demoré un montón al haber acabado antes, pero por la cantidad que acabé pareciera que era la primera. Me hice a un lado y un colorado casi empujando se la metió por la concha a Charo, la cogió un rato y sacó la pija, cambió de condón y se la mandó por el orto, por cada agujero era un condón diferente.
Al rato ví que nadie se cogía a María así que me acomodé y se la metí hasta que llegó otro, la saqué y dejé que se la sigan cogiendo.
Debemos haber estado unas 3 horas cuando alguien se acercó, destrabó los pies de María y ella desapareció, a los minutos pasó lo mismo con Charo, otras chicas ocuparon sus lugares y Rafa me dijo hiso señas para que nos fuéramos.
Buscamos nuestras cosas y nos dirigimos a la calle. Yo estaba muy cansado, tenía hambre y sed, la pija me ardía de la irritación. En eso recibimos un mensaje de las chicas para que nos juntáramos a comer. Llegamos y las 2 estaban cómo si nada hubiera pasado, mentimos de los lugares que habíamos visitado, la pasamos amigablemente y nos fuimos al hotel. Al llegar María me pidió si podíamos no coger esa noche que no se sentía del todo bien, yo asentí pero en el fondo agradecí.
Durante 3 días nos pasamos realmente visitando lugares pero los 4, nuestros nuevos amigos nos hicieron de guías, y a las noche cogíamos con María de manera desenfrenada. Me llamó la atención que empezábamos y ya me pedía que le haga el orto, de hecho me parece casi ni haber tocado su concha.
Al cuarto día otra vez el cuento y cada uno por su lado. Llegamos al lugar y Rafa preguntó si había show, le dijeron que no entonces me dijo sonriente, “ya sabes dónde están?”, yo lancé una carcajada y enfilamos para el gloryhole.
No terminamos de entrar y ya reconocí a mi mujer…esta vez había elegido el anal. Ambas mujeres estaban siendo culeadas y la cantidad de tipos superaba la vez anterior. Charo se llevaba la mayoría de la atención pero María tenía sus fanáticos.
En un momento quedamos todos mudos, por la puerta entró un negro que debe haber medido 2 metros de alto con una pija del tamaño de mi antebrazo, todos dirigimos nuestras miradas a esa pija. El negro era bastante feo y nada atlético pero la pija era monumental. Miró un rato a las chicas y se puso en la fila de Charo. Todos los que estaban en la fila se corrieron, incluso quien se la estaba cogiendo y se acomodó detrás de ella, le acercaron un forro extra large, se sobó un poco la pija y la paró del todo. Creo que todos exclamamos algo salvo Rafa que miraba entre extasiado y dopado. La escena fue terrible, el negro la tomó con una mano de la cintura y con la otra acomodó su pija, apoyó la cabeza y la empujó un poco, Charo gritó. El negro tomó un poco de lubricante y se puso en toda la pija. Rafa se acercó a mí y me dijo que le templaban las piernas, aunque temía que esa pija le hiciera real daño…muy preocupado no estaba porque no hiso nada por impedirlo. El negro con cada embate hacía que Charo lanzara un grito ahogado por lo que supongo habría sido una toalla o sábana, nunca dejó de gritar pero tampoco se fue. Cuando el negro consiguió enterrarla hasta el fondo todos gritamos de la alegría, salvo Charo que aulló de dolor. La empezó a meter y sacar muy lentamente y de a poco acelerando el ritmo. La cantidad de carne que le entraba era tremenda y ella ya puteaba en español, claramente se escuchaba cómo decía que le estaban desgarrando el culo, que le dolía que daba ostias, pedía por favor que termine. Rafa mientras tanto se masturbaba con la escena.
Yo también estaba como hipnotizado con la escena cuando me acordé de mi mujer, ella mientras esto transcurría no dejaba de ser culeada. Es que todos nos encontrábamos muy excitados con lo que veíamos y necesitábamos descargar. También rogué que no se lance con mi mujer porque si Charo que estaba acostumbrada a pijas monumentales no se bancaba esta, a mi mujer la mata. El negro demoró un montonazo en acabar y el muy hijo de puta se la sacó en cámara lenta para el clamor de la hinchada. Cuando la pudo sacar, la pija le cayó hacia abajo como si pesara una tonelada. Con Rafa quedamos mirando sin pestañear cómo le habían dejado el culo a su mujer, el diámetro era gigante. El negro desechó el forro y se fue. El que se estaba culeando a Charo antes que llegara el negro intentó continuar pero uno de seguridad se lo impidió, Charo desapareció y todos se pusieron a hacer fila en lo de María. 7 tipos había para romperle el culo y todos pasaron antes de que desapareciera, el último en pasar fue Rafa. Me hice chupar la pija en pelo y nos fuimos.
Las chicas aparecieron como 2 horas después de lo acordado, Charo se disculpó y se fue al hotel acompañada por María…las vimos cómo se alejaban sin poder caminar bien, el dolor que sentían debe haber sido terrible.
Continuará…

Primera parte
http://www.poringa.net/posts/relatos/2799827/Cornudo-Internacional.html

1 comentario - Cornudo Internacional 2