Confesiones del cinefiloco 12... UOL y las excepciones

Hubo excepciones en los encuentros de chat UOL, digo, encuanto a las maduras. Una de ellas fue una joven que estudiaba bioquímica,estaba por la calle billingurts. Nos vimos por primera vez en la pizzería deSanta fe y callao.  Era muy bonita, degafas, pelo lacio y un hablar muy suave. Además de muy agradable. Esa noche laacompañé hasta su depto., pero no subí. Tres días más tarde, por correo electrónicoella me invito a su departamento mientras estudiaba. Y allí fui. Tomamos unosmates, y llegó el beso, luego la franela. Ahí mismo donde estudiaba en elliving, sobre la alfombra medio desnudos con los lentes puestos y medias, queme éxito muchísimo, me empezó a chupar la pija. Yo con remera solamente.  Me dejo de chupar, y yo fui por su conchita húmeda.Al rato estábamos recalientes los dos. Me dice que me  ponga el forro y la coja. Y yo, obviamente nohabía llevado forro. Le dije que no pensaba que iba a suceder eso. Ella me dijoque tampoco lo imagino. La mire y el dije que iba a comprar. Asintio con lacabeza. Y me fui. A media cuadra había un kiosco. Cuando regresé, estaba leyendosus apuntes, pero sin haberse vestido. Por debajo de la mesa le comencé achupar la conchita de nuevo. Cuando nos quisimos acordar la estaba cogiendocontra la mesa. Y ¡sí! Yo acabé primero, ya me conocen. Me saque el forro. Y Lechupe la concha, cuando ella estaba excitada, ya la tenía dura de nuevo. Memiró a través de los lentes y sin dudarlo la cogí de nuevo, ahora de parado yella decía que leía… Acabamos juntos.  Alrato, me dice si me quedan forros, le digo que sí, uno, me chupa la pija, me lopone y me deja acostado sobre la alfombra mientras me coge, yo le veo esastetitas, los lentes y no puedo contenerme y acabo enseguida. Se rie. Y mesusurra. Se te acabaron los forros, vas a ir a comprar de nuevo o… La miro. ¿Oqué? Le pregunto. Se da vuelta y me muestra su culito hermoso, si lo queres, chúpamelotodo. Asiento y se sienta arriba de mi cara. Durante un rato le comí el ortocon la lengua mientras la pajeaba con la mano. Cuando no aguanto más se puso encuatro, me agarro la pija y se la llevó al orto. Tremenda cogida le pegue, quegritaba. Yo le decía paro. Y ella decía ¡NOOO! Asi que esa culeada no me la olvidomás.  Como gemía de dolor y placer.  Tuvimos tal calentura que le acabe adentro yella seguía moviendo su culo contra mí, las piernitas le temblaron cuando lesaque la pija, mezclada con mierda y un poco de sangre debo admitir que measuste cuando vi eso.  Ella se paródespacio y se fue al baño. Al rato vino bañada, me comió la boca y tomamos unosmates. Después me dijo que tenía que estudiar y me fui. A la semana le envió unmail y me contesta que no podemos vernos más, que regresó con su novio. Eso merompió el corazón, me había enamorado mal de ella y de ahí en más no contestomás mis correos ni nada… Y yo nunca me atreví a regresar a su departamento. Enfin. Una cogida que me llegó al corazón.
La foto es algo diferente en los lentes, eran algo másños, pero ella era una hermosura como esta joven...