El placer de estar atado y ser pajeado

Asi!Así!no pares!, Le decía yo a mi amigo en ese momento,aunque como estaba amordazado él solo escuchaba mis gemidos.
Estaba esposado a la silla y mi amigo estaba masturbándome,lo hacía a un ritmo sostenido,y por eso le pedía que no parara.
Cerraba mis ojos y sentía que no podía haber nada mejor en ese momento.
Mi amigo ni me miraba,estaba muy concentrado pajeandome,solo se escuchaban mis gemidos.
A un lado estaba mi ropa en un montón,al lado de la cinta con la que me amordazaron.
Se me ocurrió algo y estiré mi pie derecho y empecé a masajear el pene de mi amigo por encima de su pantalón.
Dejó escapar un gemido de placer, obviamente no se lo esperaba,así que aseguró mis pies con cinta a las patas de la silla,uno a cada lado y me dijo que así aprendería a tener los pies quietos.
Dejó de tocarme y salió un momento de la sala,y allí estaba yo,atado,desnudo y excitado.
Regresó después de unos minutos,estaba totalmente desnudo,su pene erecto estaba pidiendo una buena paja.
Se empezó a masturbar delante de mí, gemía y se movía delicioso,yo me excité aún más.
No tardó en aparecer el precum en mi pene,el cual empezó a resbalar a lo largo de él.
Mientras mi amigo seguía con su paja,ahora estaba en 4,ordenándose lentamente.
Terminó eyaculando sobre su pecho y estómago,a chorros,yo estaba muy excitado viendo su paja.
Se tomo unos minutos para recuperar el aire,se limpió y después se acercó a mí,me empezó a pajear y no aguanté más, eyaculé una buena cantidad de semen,las manos de mi amigo quedaron empapadas en él.
Me había hecho esperar un buen rato,estaba muy excitado y no podía resistir mucho.me limpió y me desató.