Estacionamiento en llamas

Estaba de novio con Sol, teníamos unos 20 años. Llevábamos casi un año saliendo. Ella era piel blanca, ojos verdes, pelo castaño. Su cuerpo era delgado, lindas tetas con una cola infernal, bien paradita.
Por mi trabajo hacía casi un mes que no nos veíamos, casi todos los días hablábamos por teléfono. Nuestra charlas eran muy calientes, además de la edad y sumado a el tiempo que no estábamos juntos era un combo explosivo, ya no aguantaba más las ganas de estar con ella. No veía la hora de llegar y pegarnos una cogida de esas que te dejan sin aliento. 
Cuando se habían dado las condiciones para regresar a casa, ella me habísa que debía viajar a la ciudad con unos profesores y compañeros por cuestiones de la facultad, y que si yo quería podríamos ir en mi auto así por lo menos pasábamos juntos el día..Tremenda bronca y amargura me agarre. No podía creer que iba a tener que esperar otro día más para poder disfrutarla en la cama.
Al día siguiente llegué temprano al pueblo. Paso a buscarlos a todos y por último a mi novia que vivía más lejos. La veo a las apuradas, nos dimos unos besos rápidos y emprendimos viaje rumbo a la ciudad. Íbamos en el auto nosotros dos, una profesora y dos compañeras de ella.
Durante todo el viaje nos miramos complices, me tocaba y también me provocaba mientras yo manejaba. Ella llevaba una camisa celeste ajustada, marcaban esas enormes tetas que parecían queriendo explotar, una falda corta con unas medias oscuras y zapatos de tacos. Se había maquillado de tal forma que sus hermosos ojos verdes se podían ver a kilómetros, labios estaban pintados de rojos. Era imposible no quedar hipnotizado por su belleza. La miraba e iba imaginando estar besandola... dejando esas tetas al aire...estar cogiendola cómo animal.. dándole empujones en cuatro mientras ella gemia de placer.. mi imaginación estaba a mil por hora. Tenía una erección que costaba disimular, ella lo notaba paracia disfrutabar verme sufrir de esa manera, se mordía la boca, pasaba su lengua como saboreando sus labios...mis impulsos eran incontrolables..trataba de pensar en otra cosa o sacar un tema de conversación que me distraiga, ya no sabía que hacer. 
Paso el viaje entre charlas, mates y mi mente pervertida. Llegamos a la ciudad y directamente fuimos al lugar de reunión. Bajan y entran por unos escalones que terminaban en la puerta principal, mientras los subían me deleitaba con su hermoso culo, marcado por esa falda, balanceándose de un lado a otro al ritmo de los zapatos tacones.  
Me fui a buscar un estacionamiento donde dejar el vehículo. Tenía en esa época un Peugeot 405 con vidrios polarizados. Encontré un lugar a 3 cuadras. Dejo el auto y regreso caminado hacia donde debia esperarlos para luego ir almorzar o emprender el regreso a casa.  
Pasaron unas dos hora, y los veo que salen del edificio. Nos juntamos y discutíamos si caminar hasta el estacionamiento o caminar en sentido opuesto a un restaurante, a lo que yo acote que lo mejor era que vallan mistras iba a buscar el auto, a lo que Sol decide acompañarme. Nos separamos en sentido opuestos a dónde se dirígia el resto. 
Mientras caminábamos la abrazaba, la besaba pero tenía que sujetarme, la reación de mi pene era imposible de disimular. Parecía que mi pantalón reventaría, ya no podía aguantar las ganas de sentir su cuerpo contra el mío, quería llegar lo mas rápido posible a casa... 
Entramos al estacionamiento, pague el tiempo de permanencia y nos dirigimos hasta el auto. Estaba a unos 5 vehículos de dónde estaban los empleados del estacionamiento. Lo puse en marcha y aproveché para darle una beso apasionado a Sol, la idea era darle un beso e ir hasta donde estaban los demás para almorzar. Se hizo imposible, la intensidad de los besos fue subiendo, todo se fue poniendo más candentes. Empecé a frotar sus tetas por sobre la camisa, ella hacía lo mismo con mi bragueta, por encima del pantalón. Queríamos parar, pero las ganas eran más fuerte. Pasaban los empleados por detrás del auto, la gente que entraba y salía del lugar, nos separaba del exterior únicamente un par de vidrios polarizados. 
Nosotros seguíamos en nuestro mundo, comencé a meter mi mano por debajo de la falda y sentí su bombacha muy humedecida. Los besos eran muy intensos, podía sentir que ella estaba muy exitada, su respiración aumentaba, estaba besando su cuello mientras desabrochaba la camisa.. ya no había retorno. La adrenalina de ser descubierto o nos vean en el lugar nos exitaba aún más. Nos pasamos al asiento trasero y luego me pasé yo. Baje mi ropa hasta mis tobillos, mientras ella abría su camisa y levantaba su falda. Las venas de mi verga parecían que explotarían, estába tiesa, muy caliente.. ella se agachó y de una se la trago hasta el fondo con desesperación. Empezó a chuparmela con desesperación, se la metía toda en la boca hasta quedar sin aire. Mientras tanto yo iba corriendole la tanga, y empecé a meter mis dedos en la conchita que estaba muy mojada. Comencé de a poco, ella comenzó a gemir de placer mientras tenia mi pija en la boca.. se movía con el movimiento de mi mano, buscando que mis dedos entrarán hasta el findo de su conchita.. no había resistencia mis dedos se deslizaban muy facil estaba muy empapada.
De golpe dejo mi verga, dió un movimiento y se sentó enterrandose mi verga, entro hasta el fondo. Ella dió un gemido de placer intenso, luego respiro profundamente como que la tenía clavada hasta el fondo y empezó a cabalgar mi pija. Quería que entrara toda y más también, empujaba sus caderas hacia abajo para que cada empujón la perfore, podía ver su rostro como disfrutaba. Sus gemidos eran intensos, mientras chupaba sus tetas, ella me agarraba con fuerza para que me metira sus tetas dentro de mi boca. Ya no podía soportar mucho más.. estaba por explotar, ella hacía movimento cada ves más intensos, su respiración iba en aumento, como los latidos de su carazon, nuestros cuerpos sudaban por la forma acelerada de mover nuestros cuerpos... hasta que me vino un torrente de semen y sentí una explosión dentro de su conchita, sentí como que cada empujón salían chorros y chorros adentro de ella, mientras me la iba succionaba con su vagina, quería sacarme hasta la última gota de seman.. mientras iba bajando la intensidad volvíamos a nuestros cabales, volvimos a la realidad, estábamos en un estacionamiento, había gente cerca nuestro. Nos acomodamos la ropa y tratamos de acomodar el auto para ir a buscar los demás. Mientras tanto no podía creer esos 15 min extremos que habíamos tenido, fluía la adrenalina y la exitacion por nuestros cuerpos. salimos del lugar, fuimos almorzar con los demás. 
Por la demora pusimos como excusa el caos en el tránsito. Pero fue una experiencia inolvidable la del estacionamiento aquel día...